¿Podemos definir las proporciones del ser humano perfecto mediante fórmulas matemáticas? El sabio renacentista versado en todos los ámbitos del conocimiento humano, Leonardo Da Vinci, consideraba que sí. Una afirmación avalada por los estudios anatómicos de las proporciones humanas que el genio polifacético llevó a cabo de forma exhaustiva en torno a 1490.

La motivación que llevó a Da Vinci a realizar esta investigación fue su férrea inclinación por la búsqueda de la forma ideal del cuerpo humano, y, según el cual, cada parte debía ser una fracción de un todo. En base a esta teoría dibujó el Hombre de Vitruvio, uno de los símbolos más emblemáticos y reconocidos de la historia del Arte y que, por medio de la simetría usada en la arquitectura, representa al hombre perfecto. Pero, ¿Es esto posible?, ¿este canon puede aplicarse a una persona real?

El ser humano no es perfecto en su plenitud, ni física ni mentalmente, y son esos ‘defectos’ e imperfecciones los que nos hacen únicos e irremplazables”, relata el Doctor Sebastián Moya como experto en cirugía estructural de la nariz y reconocido entre sus pacientes por el equilibrio y la armonía que consigue en cada cirugía.

Volviendo a Da Vinci, la prueba que desbanca la idea del canon perfecto es que el propio artista modificó las proporciones de Vitruvio y añadió sus propias reglas.

En base a esta interesante indagación, en el presente artículo deseamos hablarte de la importancia de las proporciones y el equilibro de las facciones del rostro a la hora de realizar una rinoplastia. Y todo ello, bajo la principal premisa que el doctor traslada a cada uno de sus pacientes: “no existe la nariz perfecta, sino una nariz para cada persona”.

 

La nariz eje principal del rostro

La nariz es un elemento anatómico que aporta armonía y, debido a la posición central que ocupa, supone el eje principal al rostro. Dado el elevado peso visual que posee en nuestra cara, el deseo por mejorar la estética de nuestra nariz y armonizar el rostro lleva a casi 20.000 españoles a someterse a una cirugía plástica cada año. De hecho, según datos de la Asociación Española de Cirugía Estética Plástica (AECEP), la rinoplastia encabeza la lista de procedimientos más demandados, desplazando al tradicional aumento de pecho.

 

¿Qué tipo de clientes buscan en una rinoplastia armonizar su rostro?

“Por un lado, encontramos los pacientes con deformidades objetivas y, por lo tanto, sin síntomas de estrés psicológico. Este grupo se puede fraccionar en: clientes que buscan mejorar su aspecto físico y/o sus funciones respiratorias derivadas de un tabique nasal desviado”, explica el Doctor Moya. A lo que añade:

“Por otro lado, situamos a los pacientes que tienen como objetivo lograr la perfección. Éstos no suelen presentar deformidades estéticas y funcionales graves, pero aspiran a una belleza basada en la simetría y la perfección”.

Como cirujano, Sebastián Moya defiende que es fundamental conocer las causas y motivaciones de cada paciente para conocer sus expectativas y ofrecerle los resultados deseados.

 “Hemos de tener en cuenta que se trata de un trabajo de artesanía en el que tanto paciente y cirujano deciden qué cambios se van a realizar en la nariz con respecto a su tamaño y su forma”.

 

¿Cómo conseguir una armonía en el rostro?

A la hora de buscar la armonía en el rostro, el Doctor Moya sigue el siguiente procedimiento con cada uno de sus pacientes: coge una regla y les mide delante de un espejo tanto la frente, la nariz como el tercio inferior, mientras les explica los estándares de su cara. El objetivo primero y último es hacer un estudio previo de cada rostro antes de llevar a cabo una cirugía personalizada.

“El reto de la cirugía estética nasal es mantener un equilibrio entre una buena respiración nasal y una nariz bonita. Esta es mi filosofía de la cirugía estructural de la nariz”.

Por todo ello, analizar y conocer las particularidades de cada paciente permite alcanzar un panorama más amplio sobre cada caso concreto. Características únicas y personales que debe ser consideradas tanto por el cirujano que realiza la rinoplastia, como por el paciente que busca en ella, mejorar su imagen corporal.

El resultado de cada rinoplastia acompañará al cliente a lo largo de toda su vida y de ahí la importancia de la armonía en cada una de sus facciones. Y al igual que las obras de Da Vinci, las cirugías deben realizarse con el poder de la observación, la rigurosidad de la medición y la fuerza de la pasión.

El Doctor Sebastián Moya cuenta con las técnicas más vanguardistas e innovadoras para conseguir los resultados deseados. Contacta con nuestro equipo y pide tu cita para conseguir la armonía de tu nariz.